Reforma Educativa: La trampa del Cártel 22
POLÍTICA DE SUMA CERO
Enajenados con el ofrecimiento del entonces candidato de la coalición “Juntos haremos historia”, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, en el discurso de San Pablo Guelatao, de desaparecer la Reforma Educativa, la dirigencia del Cártel 22, se fue de bruces. El martes 3 de julio, justo cuando ya se festinaba el triunfo de AMLO de manera avasalladora en el país, con más de 30 millones de votos, saltó a la palestra ELOY LÓPEZ HERNÁNDEZ, Secretario General del Cártel, para exigir –obviamente a destiempo, dado que el presidente electo no ha entrado en funciones- cumplir con la promesa hecha.
La respuesta vino en dos vertientes, sin duda contradictorias. Por un lado la de quien fuera Coordinadora de la campaña de AMLO, TATIANA CLOUTHIER, quien dijo que la multicitada Reforma “va para atrás”. Poco después tocó el turno a ESTEBAN MOCTEZUMA BARRAGÁN, quien será en el esquema del equipo emergente, el muevo titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP). Éste sostuvo que “el programa de evaluación educativa de mantendrá durante el gobierno de LÓPEZ OBRADOR”. El mismo tabasqueño admitió que el tema será objeto de una consulta popular.
Nos preguntamos: ¿por fin, habrá de desaparecer la multicitada Reforma o será una de las promesas fallidas como algunas que están empezando a mostrar el verdadero rostro de AMLO? Por lo pronto, el Cártel 22, que recién concluyó el ciclo escolar 2017/2018, luego de casi un mes de paro, está inquieto. Hay claroscuros que no acaba de discernir. De irse a una consulta es probable que la Reforma Educativa como tal no desaparezca, sino que tenga adecuaciones, que es diferente.
En otro contexto, no hay que olvidar la soterrada oposición de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y su adlátere, la Sección 22, a la evaluación magisterial, que es el eje de la aludida Reforma. Es a ésta a la que le tienen tirria, porque asumen que de no aprobar los exámenes podrían perder su plaza. ¿Qué sentido tendría entonces abrogar la Reforma Educativa, dejando tal cual la evaluación docente? Obvio, no tendría ningún sentido. Sería pues una promesa incumplida de lo que están dándose cuenta los dirigentes, demasiado tarde.
Pese a todo ello, hay que escuchar las arengas y apologías de las bases magisteriales respecto al triunfo de LÓPEZ OBRADOR. Hacen de cuenta que seguirán con más privilegios que hasta hoy y a lo mejor, hasta hacen ley la protesta callejera y justificar su desarraigo docente. No cabe duda, la ingenuidad aún hace mella. (JPA)